Leonardo

noche de estrellas, gritos de amor, caminatas en las vías del ferrocarril, enojos abruptos, sonrisas genuinas, inteligencias multicolor y amaneceres saltando como chapulín.

pequeño gran hombre que llegó con fuerza a templar el carácter de los reyes del barrio y a entusiasmar a sus abuelos con caricias constantes.

Leonardo te leo y te encuentro tan lleno de versos y prosas que fluyen con el universo cada día desde hace tres veranos.

nuestro tiempo se ha llenado de estrellas que anuncian la luz en la humanidad, en nuestro andar cotidiano, en la leche que le robas a las vacas, en tu oficio para educarnos y hacernos caminar por las banquetas.

pequeño saltamontes cargado de bucles y de ideas perennes y que rodean nuestro cuerpo de energías inagotables como tu ser.

querido Leo, te leo y te encuentro tan fugaz como una estrella, tan elemental en nuestras vidas como el agua y tan maravilloso como la presencia de los colibríes en los árboles jamaica.